Rudy Gobert avisa de un cambio en su mentalidad ofensiva

Rudy Gobert saltó a la pista con ganas de morder durante el partido inaugural de la temporada. En el segundo cuarto ya acumulaba un doble-doble y finalizaría el partido con 16 puntos y 21 rebotes en la cómoda victoria de los Utah Jazz sobre Oklahoma City Thunder.
Su trabajo en la pintura estableció un nuevo récord de franquicia en el número de rebotes registrados en un primer partido de temporada, superando las 19 capturas firmadas por Carlos Boozer el 1 de noviembre de 2006.
Tanto los Jazz como el internacional francés quisieron lanzar un mensaje al resto de equipos de la competición ya en el primer enfrentamiento del curso. De hecho, la dolorosa derrota en Semifinales de Conferencia ante Los Angeles Clippers no solo abrió heridas pasadas dentro del seno de la organización sino que también convenció a analistas y aficionados externos de que estos Jazz son uno de “esos equipos que solo rinden en regular season.”
A un nivel más concreto, Gobert fue señalado como el chivo expiatorio. El center sufrió lo indecible para hacer frente al small-ball angelino, el cual lo obligaba a salir constantemente de su zona de confort. No siendo esta una responsabilidad exclusivamente suya, el jugador asumió su parte de culpa para recogerla, estudiarla y amoldarla al nuevo curso.
“Obviamente es doloroso”, afirmó Gobert tras la derrota que puso fin a la temporada 2020-21. “Tuvimos un gran año. Sentimos que teníamos todas las armas que necesitábamos para intentar ganar el título. Es doloroso pero todo es una experiencia de aprendizaje. Ojalá aprendamos de ellos.”
A pesar de haber sido defendido de manera constante por parte de sus compañeros y cuerpo técnico, algunos todavía señalan a Gobert como la razón principal de la debacle de Utah en post-temporada, donde han sufrido eliminaciones similares en el último lustro.
Sin embargo, el pívot tomó todas esas críticas como una mezcla de templanza y motivación para seguir creciendo y mejorando como jugador. “El baloncesto es solo un deporte”, afirmó Gobert durante la pre-temporada. “Tenemos que usar todas estas experiencias para los nuevos obstáculos que nos encontremos. No es ningún tipo de estrés postraumático ni nada por el estilo. Es solo baloncesto. Aprendes y tratar de regresar más fuerte el siguiente año.”
Lo cierto es que volvimos a presencia al Gobert más dominador bajo los tableros en el debut del curso. Pero no solo eso, sino que el interior dio muestras de una mayor agresividad para atacar el aro cuando tuvo la ocasión.
Así, este primer compromiso ha devuelto a un Gobert agresivo no solo en la protección de su propio aro, sino también para atacar el del rival. “Me siento cada vez más cómodo”, ha declarado el jugador. “He estado trabajando mucho en ello y es emocionante saber que ni siquiera he arañado la superficie de lo que puedo hacer ofensivamente.”
Su desarrollo individual en el ámbito ofensivo no solo ampliará su propia dimensión como jugador sino que impulsará todavía más las posibilidades colectivas y de éxito de los Jazz. Un punto importante pues Gobert es un pilar fundamental desde el bloqueo directo, por lo que más opciones desde el roll supondrán también más vías de anotación.
“Cuando eres tan bueno en algo, sueles querer concentrarse en ello únicamente”, afirmó su compañero Donovan Mitchell sobre él. “Es tan bueno siendo una fuerza defensiva que la gente a veces no mira al otro lado. Él sabe que necesita trabajar y mejorar. Se pone mucha presión sobre sí mismo para poder hacer ciertas cosas. Lo más importante que estamos viendo es recibir y anotar, jugar a través del contacto. Es ahí donde puedo decir: ‘está bien, ha dado el siguiente paso’.”
Sin embargo, el tres veces elegido Defensor del Año comprende que este tipo de producción no puede suponer un hecho aislado y que precisará de trabajo, constancia y determinación para que se asiente como un verdadero factor diferencial. “Lo hizo en pre-temporada, lo hizo en el training camp y ahora creo que es el nuevo nivel que veremos en él”, ha avisado Mitchell.
Si verdaderamente Rudy Gobert es capaz de plasmar sobre la cancha un nivel ofensivo que, hasta el momento, ha sido muy limitado, el nuevo concepto colectivo de los Utah Jazz abrazará una dimensión competitiva mucho mayor.
(Fotografía de portada de Utah Jazz)